El abuelo Eduardo quiso tomar mates antes de partir... El político barrial falleció cansado de luchar.El fin llegó un día de agosto de 1977. Sus nietos lo acompañaron a su nueva morada... A mí me obsequió un anillo de oro con una moneda francesa de 1860 que perteneció a mi bisabuela Melanie y la famosa pipa de François...
El abuelo encontró por fin el alma de su madre en la atmósfera de ese estrecho camino; quiso hablarle de Juana (mi abuela) y de sus nietos, del cuaderno de poemas de cuando era chico..., e intentó ver a su hermana y a José que se habían ido unos años antes.
El abuelo encontró por fin el alma de su madre en la atmósfera de ese estrecho camino; quiso hablarle de Juana (mi abuela) y de sus nietos, del cuaderno de poemas de cuando era chico..., e intentó ver a su hermana y a José que se habían ido unos años antes.
Eduardo le contó a La Gra-mamá (mi bisabuela) de los campos y de la cosecha de la soja. No quiso decirle que su estancia estaba abandonada porque tuvo miedo de que se pusiera triste; seguramente ella ya lo sabría porque las almas buscan su espacio y siempre están de regreso.Sus descendientes guardaron sus bombachas, la rastra de plata, los facones y los cueros trenzados.
Eduardo fue como un gaucho que arreaba el ganado a pie o a caballo sin mirar si era sábado o domingo.
Eduardo fue como un gaucho que arreaba el ganado a pie o a caballo sin mirar si era sábado o domingo.
En los últimos tiempos, era un viejecito que alegraba con su apatía.-No molesten a "papá"-les reprochaba la abuela Juana a los nietos mientras iba y venía de la cocina con huesitos de pollo en la boca.En las palabras entrecortadas y en los pozos de jardinero, el abuelo había hecho su fama. Gordito, de baja estatura y con los pantalones a medio camino se lo veía al anochecer rumbo al almacén...
La muerte se lo llevó en un suspiro y sin dejar que pudiera dar una sola orden porque ya no quería pelear; estaba cansado de escuchar a Juana llorar y decir:
-¡Pobre Alberto!.
-¡Pobre Alberto!.
Luján 1997.
Mi abuelo Eduardo Fraix falleció el 24 de agosto de 1977.
Fragmento de la novela inédita de mi autoría "Nuestra Paisana Francesa".