El pequeño:
Quiero que me guardes
en tu corazón.
No hay mejor refugio
ni cuna mejor
que el tibio nidito
de tu corazón.
La mamita:
Ante que nacieras
te ofreció mi amor
todos los latidos
de mi corazón
y al compás de aquéllos
te acuné hasta hoy.
Vuelve cuando quieras
que hallarás calor
en el fiel refugio
de mi corazón.
Libro de lectura “Rocío” de Julia M. Crespo, Edit. Kapeluz.